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Política exterior de Carlos V
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| - | Durante la primera mitad del siglo XVI la política exterior de Carlos V tuvo que hacer frente simultáneamente a tres conflictos: la rivalidad con Francia, la expansión del imperio turco y la reforma protestante en Alemania. | + | Durante la primera mitad del siglo XVI la política exterior de '''Carlos V''' tuvo que hacer frente simultáneamente a tres conflictos: la rivalidad con Francia, la expansión del imperio turco y la reforma protestante en Alemania. |
| - | + | == Aspecto Político: El conflicto con Francia == | |
| - | + | === Causas === | |
Los motivos de este enfrentamiento eran: | Los motivos de este enfrentamiento eran: | ||
| - | + | * La rivalidad personal entre Carlos V y Francisco I (monarca francés). | |
| - | + | * La rivalidad territorial por el control de Navarra, Borgoña y sobre todo por la hegemonía en Italia. El control del ducado de Milán era fundamental para el emperador pues era clave en las comunicaciones entre los dominios imperiales al norte y sur de los Alpes. | |
| - | + | === Hechos más relevantes y consecuencias === | |
El emperador hizo frente a varias guerras con Francia, la primera estalló en 1521 cuando los franceses invadieron Navarra y Milán. Fueron rechazados por las tropas imperiales primero en Navarra y después en Milán en la batalla de Pavía en 1525. | El emperador hizo frente a varias guerras con Francia, la primera estalló en 1521 cuando los franceses invadieron Navarra y Milán. Fueron rechazados por las tropas imperiales primero en Navarra y después en Milán en la batalla de Pavía en 1525. | ||
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En 1529 se firma con Francia otra paz, por esa paz Carlos V renunció al ducado de Borgoña y el rey francés a sus pretensiones sobre Milán. La última de las guerras con Francia tuvo lugar ya con su hijo Felipe II que obtuvo la victoria de San Quintín en el año 1557 sobre los franceses. | En 1529 se firma con Francia otra paz, por esa paz Carlos V renunció al ducado de Borgoña y el rey francés a sus pretensiones sobre Milán. La última de las guerras con Francia tuvo lugar ya con su hijo Felipe II que obtuvo la victoria de San Quintín en el año 1557 sobre los franceses. | ||
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El emperador como defensor de la cristiandad se tuvo que enfrentar al Islam, es decir, al imperio turco-otomano y a la reforma protestante en Alemania. | El emperador como defensor de la cristiandad se tuvo que enfrentar al Islam, es decir, al imperio turco-otomano y a la reforma protestante en Alemania. | ||
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La confrontación se sitúa en: | La confrontación se sitúa en: | ||
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Los turcos y los piratas berberiscos son una constante del reinado de Carlos V. | Los turcos y los piratas berberiscos son una constante del reinado de Carlos V. | ||
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| - | Carlos V consideró la lucha contra la reforma protestante como una obligación porque se consideraba el jefe político de la cristiandad. En un primer momento Carlos intenta lograr una conciliación con Lucero y con los príncipes alemanes que apoyaban la reforma y para ello convoca una reunión (dieta) en la ciudad de Works, sin lograr nada. Incluso Carlos reclamó del Papa la convocatoria de un concilio para la reforma de la Iglesia pero esta convocatoria llegó tarde y fue rechazada por los protestantes (concilio de Trento). En consecuencia Carlos V se tuvo que enfrentar a los príncipes alemanes protestantes y los venció en la batalla de Mühlberg que si bien supuso un aumento de su poder en Alemania no resolvió la división religiosa. Decepcionado y cansado Carlos V decidió cerrar el conflicto con Alemania aceptando la paz de Ausburgo (1555) en la que se proclamó la libertad religiosa de los príncipes alemanes y su capacidad para imponer su religión a sus súbditos. Este fracaso en Alemania explica su abdicación al año siguiente (1556) y el reparto que hizo de sus posesiones: a su hermano Fernando le dejó el patrimonio de los Austrias y el imperio alemán mientras que su hijo Felipe II recibió los territorios hispánicos y sus colonias además de Italia y los Países Bajos. | + | Carlos V consideró la lucha contra la reforma protestante como una obligación porque se consideraba el jefe político de la cristiandad. En un primer momento Carlos intenta lograr una conciliación con Lucero y con los príncipes alemanes que apoyaban la reforma y para ello convoca una reunión (dieta) en la ciudad de Works, sin lograr nada. Incluso Carlos reclamó del Papa la convocatoria de un concilio para la reforma de la Iglesia pero esta convocatoria llegó tarde y fue rechazada por los protestantes (concilio de Trento). En consecuencia, Carlos V se tuvo que enfrentar a los príncipes alemanes protestantes y los venció en la batalla de Mühlberg que si bien supuso un aumento de su poder en Alemania no resolvió la división religiosa. Decepcionado y cansado Carlos V decidió cerrar el conflicto con Alemania aceptando la paz de Ausburgo (1555) en la que se proclamó la libertad religiosa de los príncipes alemanes y su capacidad para imponer su religión a sus súbditos. Este fracaso en Alemania explica su abdicación al año siguiente (1556) y el reparto que hizo de sus posesiones: a su hermano Fernando le dejó el patrimonio de los Austrias y el imperio alemán mientras que su hijo Felipe II recibió los territorios hispánicos y sus colonias además de Italia y los Países Bajos. |
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Durante la primera mitad del siglo XVI la política exterior de Carlos V tuvo que hacer frente simultáneamente a tres conflictos: la rivalidad con Francia, la expansión del imperio turco y la reforma protestante en Alemania.
Tabla de contenidos |
Aspecto Político: El conflicto con Francia
Causas
Los motivos de este enfrentamiento eran:
- La rivalidad personal entre Carlos V y Francisco I (monarca francés).
- La rivalidad territorial por el control de Navarra, Borgoña y sobre todo por la hegemonía en Italia. El control del ducado de Milán era fundamental para el emperador pues era clave en las comunicaciones entre los dominios imperiales al norte y sur de los Alpes.
Hechos más relevantes y consecuencias
El emperador hizo frente a varias guerras con Francia, la primera estalló en 1521 cuando los franceses invadieron Navarra y Milán. Fueron rechazados por las tropas imperiales primero en Navarra y después en Milán en la batalla de Pavía en 1525.
En el 1536 se reanudaron las luchas con Francia tanto en Italia como en los Países Bajos llegando el Papa a apoyar a Francia lo que provocó que en el año 1527 las tropas imperiales, es decir, alemanas y española saquearan Roma.
En 1529 se firma con Francia otra paz, por esa paz Carlos V renunció al ducado de Borgoña y el rey francés a sus pretensiones sobre Milán. La última de las guerras con Francia tuvo lugar ya con su hijo Felipe II que obtuvo la victoria de San Quintín en el año 1557 sobre los franceses.
Aspecto Religioso
El emperador como defensor de la cristiandad se tuvo que enfrentar al Islam, es decir, al imperio turco-otomano y a la reforma protestante en Alemania.
La guerra contra el Islam
La confrontación se sitúa en:
- La zona central de Europa: el imperio turco-otomano ocupa Hungría y sitia varias veces Viena pero las tropas imperiales los expulsan.
- La zona del Mediterráneo occidental: era un núcleo importante donde Carlos V tuvo que lanzar una ofensiva contra el pirata Barba Roja y para ellos conquista Túnez (1535) y lo intenta con Argel pero fracasa (1541).
Los turcos y los piratas berberiscos son una constante del reinado de Carlos V.
La guerra contra la Reforma Protestante
Carlos V consideró la lucha contra la reforma protestante como una obligación porque se consideraba el jefe político de la cristiandad. En un primer momento Carlos intenta lograr una conciliación con Lucero y con los príncipes alemanes que apoyaban la reforma y para ello convoca una reunión (dieta) en la ciudad de Works, sin lograr nada. Incluso Carlos reclamó del Papa la convocatoria de un concilio para la reforma de la Iglesia pero esta convocatoria llegó tarde y fue rechazada por los protestantes (concilio de Trento). En consecuencia, Carlos V se tuvo que enfrentar a los príncipes alemanes protestantes y los venció en la batalla de Mühlberg que si bien supuso un aumento de su poder en Alemania no resolvió la división religiosa. Decepcionado y cansado Carlos V decidió cerrar el conflicto con Alemania aceptando la paz de Ausburgo (1555) en la que se proclamó la libertad religiosa de los príncipes alemanes y su capacidad para imponer su religión a sus súbditos. Este fracaso en Alemania explica su abdicación al año siguiente (1556) y el reparto que hizo de sus posesiones: a su hermano Fernando le dejó el patrimonio de los Austrias y el imperio alemán mientras que su hijo Felipe II recibió los territorios hispánicos y sus colonias además de Italia y los Países Bajos.
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