Requisitos de las acciones morales
De Wikillerato
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# Por último, la '''ejecución''', la realización propiamente dicha. | # Por último, la '''ejecución''', la realización propiamente dicha. | ||
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La intención a veces puede jugarnos malas pasadas; podemos hacer mal objetivamente pero con '''buena intención'''; por ejemplo engañar a una madre sobre la conducta de su hijo en el colegio, para que no se disguste o sufra. | La intención a veces puede jugarnos malas pasadas; podemos hacer mal objetivamente pero con '''buena intención'''; por ejemplo engañar a una madre sobre la conducta de su hijo en el colegio, para que no se disguste o sufra. | ||
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En síntesis, la plena conciencia o racionalidad y la libertad son los requisitos fundamentales; si falla alguno de ellos, la moralidad del acto varía y no es imputable. | En síntesis, la plena conciencia o racionalidad y la libertad son los requisitos fundamentales; si falla alguno de ellos, la moralidad del acto varía y no es imputable. | ||
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Por ejemplo: «Si alguien me apunta con un revólver y me obliga a hacer algo incorrecto; aquí no he actuado con libertad, y por tanto, no soy responsable de mi acción». | Por ejemplo: «Si alguien me apunta con un revólver y me obliga a hacer algo incorrecto; aquí no he actuado con libertad, y por tanto, no soy responsable de mi acción». | ||
Revisión actual
- La acción moral debe ser en primer lugar consciente, la persona debe tener plena conciencia de sus actos.
- Debe buscar un fin moral objetivo, una meta que proyectamos, un bien, de acuerdo con las normas morales.
- Además tiene también un fin subjetivo o intención, el fin que busca la persona que realiza la acción moral.
- La acción moral requiere una fase de deliberación; que consiste en sopesar los pros y los contra que sobrevendrían de la ejecución.
- Tomar una decisión libre en función de la deliberación.
- Por último, la ejecución, la realización propiamente dicha.
La intención a veces puede jugarnos malas pasadas; podemos hacer mal objetivamente pero con buena intención; por ejemplo engañar a una madre sobre la conducta de su hijo en el colegio, para que no se disguste o sufra.
También podemos hacer un bien objetivo con mala intención; por ejemplo, un alcalde puede realizar mejoras en el urbanismo de su ciudad, con la intención egoísta de ser elegido en las siguientes elecciones.
La intención modifica la moralidad de nuestras acciones haciéndolas mejores o peores.
En síntesis, la plena conciencia o racionalidad y la libertad son los requisitos fundamentales; si falla alguno de ellos, la moralidad del acto varía y no es imputable.
Por ejemplo: «Si alguien me apunta con un revólver y me obliga a hacer algo incorrecto; aquí no he actuado con libertad, y por tanto, no soy responsable de mi acción».
Si al cometer un delito una persona —un homicidio, por ejemplo—, tiene perturbadas sus facultades mentales; ésta es una circunstancia eximente y la persona no tiene responsabilidad criminal. No es lo mismo, por tanto, un «homicidio» que un «asesinato». En el asesinato hay plena intención de dañar quitando la vida de un inocente, hay «premeditación y alevosía», mientras que el homicidio puede realizarse accidentalmente, sin querer, o en defensa propia.
Es la libertad, condición sine qua non de las acciones morales, la que nos hace responsables ante nosotros mismos y ante los demás; y también, fundamenta nuestra vida en sociedad. Puedo actuar según mi libertad, pero he de respetar la libertad de los demás.
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