El Romancero
De Wikillerato
Revisión de 06:27 22 feb 2007
Tabla de contenidos |
Definiciones
- El Romancero representa el corpus completo de romances del mundo hispánico (españoles, portugueses, catalanes, hispanoamericanos, judeoespañoles), tanto los de carácter oral-tradicional, como los de origen erudito y de autor conocido.
- Aunque en la teoría, el romance es un poema narrativo relativamente breve, de tono épico-lírico, en versos monorrimos de 16 sílabas divididos en dos hemistiquios de ocho sílabas con rima asonante en los hemistiquios pares; en la práctica, un buen número de romances no se ajusta a este patrón (hay romances de más de mil versos, otros apenas tienen relato y el tono es esencialmente lírico, hay composiciones en diversos metros que han sido admitidas en el corpus, muchos incluyen varios cambios de asonancia).
Origen
El romance proviene de la fragmentación de los cantares de gesta a finales de la Edad Media. Así,
- el octosílabo asonantado deriva del verso épico anisosilábico, también asonante;
- ambos lenguajes poéticos comparten fórmulas;
- un buen número de relatos romancísticos del siglo XVI deriva directamente de fuentes épicas.
El Romancero Viejo
Son los más antiguos y desconocemos sus autores. Aunque la época en que se recogen es el siglo XVI, las primeras muestras serían del XIV, si no anteriores.
Clasificación
- Por el tema:
- Aquellos que provienen de un hecho real o de los cantares de gesta.
- Histórico-épicos.
- Noticieros: nacen de la convivencia con los árabes. Son de dos tipos:
- Fronterizos.
- Moriscos.
- De invención: fruto de la imaginación de sus autores.
- Líricos: Tratan el tema amoroso y la expresión de sentimientos. Predomina la descripción y la acción es escasa.
- Novelescos: Destaca el elemento narrativo, la ficción y el diálogo entre los personajes.
- Aquellos que provienen de un hecho real o de los cantares de gesta.
- Por su estructura:
- Romance-cuento: relata una historia completa de principio a fin.
- Romance-escena: se concentra en un momento concreto de la acción.
Transmisión textual
Aunque el primer romance conservado data de 1421 (La dama y el pastor, transcrito en Italia por Jaume Olesa), los primeros indicios de romances se remontan al primer tercio del siglo XIV.
- A lo largo del XV la documentación manuscrita es todavía esporádica: Juan Rodríguez del Padrón copia y adapta tres textos en el Cancionero de Londres.
- Ya en el siglo XVI, varios se recogen en el Cancionero musical de Palacio (1500-1520).
- Los primeros romances cultos aparecen en el Cancionero general de Hernando del Castillo (1511).
- La primera antología romancística (el Libro en el qual se contienen cincuenta romances) se imprime entorno a 1525.
- Hacia 1548, en Amberes, Martín Nucio publica su Cancionero de romances, iniciando la época de los cancioneros, entre los que destacaremos:
- Cancionero de romances (1550), del propio Nucio,
- Silva de romances, de Esteban G. de Nájera (1550-51),
- Rosas de romances de Joan Timoneda (1573).
Romancero Nuevo
En 1580, con la publicación de las Flores de romances y la masiva composición de poemas cultos en metro romancístico, comienza el apogeo del Romancero nuevo, que culmina en el Romancero general (1600).
El siglo XVII admiró el caudal de romances recuperado de épocas anteriores y no dudó en imitarlo y revitalizarlo. Autores como Lope de Vega, Góngora o Quevedo escribieron romances al modo de los antiguos.
A partir de aquí el género se divide:
- El Romancero viejo (tras haberse difundido a todas las regiones del mundo hispánico, desde Portugal hasta Cataluña, desde América hasta los núcleos sefardíes de Turquía y del norte de África) pasa a ser del pueblo.
- El Romancero nuevo, por otra parte, confirma el romance como vehículo creativo. De hecho, no deja de cultivarse en el siglo XVIII (Meléndez Valdés, Leandro Fernández de Moratín), florece durante el romanticismo (Duque de Rivas, José de Espronceda, José Zorrilla) y tiene un nuevo momento de esplendor en la literatura del primer tercio del siglo XX (Antonio Machado, Miguel de Unamuno, Federico García Lorca).
Romancero Vulgar
Nace en el propio siglo XVI con composiciones en germanía sobre valentones, florece (impreso en pliegos sueltos vendidos y cantados por ciegos ambulantes) en los siglos XVIII y XIX y pervivirá más allá de los comienzos del XX.
Estilo
Aunque para un género de trayectoria tan larga como éste cualquier generalización conlleva múltiples excepciones, podríamos caracterizarlo con las siguientes notas:
- Concisión y poder dramático.
- Se combina la narración y el diálogo.
- Lenguaje llano, sin símiles complejos, metáforas y otros recursos retóricos.
- Posee un mensaje implícito más que explícito.
- Falta de didactismo y religiosidad.
- Gran capacidad de emocionar gracias -en parte- a las repeticiones y el uso del paralelismo y de las formas deícticas, apostróficas y exclamativas.
Enlaces externos
- Proyecto sobre el Romancero pan-hispánico.
- Romancero viejo.
- Romances del Cancionero General recopilado por Hernando del Castillo, Valencia 1511.
- Cancionero de romances, Amberes, 1550.
- Diego Catalán. Sobre el lenguaje poético del romancero: la "fórmula" como tropo.
Volver a Literatura medieval