Estoria de Santa María Egiçiaca
De Wikillerato
De esta obra se nos han conservado en castellano dos versiones: una en verso y otra en prosa, que es la que aquí nos interesa. Ambas son traducción del poema francés Vie de Sainte Marie l´Egiptienne.
La versión prosificada es muy fiel al original y, pese a ello, apenas presenta -como señala Alvar (1)- algún galicismo. Se divide en dos partes simétricas en torno a los conceptos pecado-arrepentimiento y penitencia-santidad.
La historia es la siguiente:
María es una joven egipcia cristiana muy bella y de buena familia a la que su padre e su madre la criaron e la ensennaron mala mente entre su conpanna. Por causa de esta mala crianza, la protagonista era asy pressa de la luxuria y abondaua su cuerpo atodos aquellos que la querian avnque fuessen hermanos o parientes o cunnados (...). Cuando la madre le reprende esta actitud, María se marcha de la casa y se establece en Alejandría, donde se dedica a la prostitución. Un día de mayo (nótese el simbolismo, pues este viaje es el comienzo de su nueva vida) se embarca con unos romeros que van a Jerusalén. Ya en la ciudad santa, decide entrar en una iglesia, pero no puede pues semejauale que veya caualleros que tenian espadas desnudas enlas manos e quele vedauan la entrada. Entonces començo a sospirar de todo corasçon, desy a llorar e rronper sus cabellos. En la puerta del templo hay una imagen de la Virgen y María pide que le ayude a luchar contra el diablo y le promete apartarse de él. Por fin puede entrar y cuando sale escucha una voz que le ordena retirarse de por vida al desierto para limpiar sus pecados. La joven obedece.
En el yermo lleva una vida de oración y privaciones que la transforma por completo en lo espiritual y en lo físico:
(...) e su carne que era blanca commo nieue finco toda negra (...) ssus cabellos tornaron blancos, ssu rostro torno anpollado e su boca quebrada e e sus ojos fueron couados e su pecho prieto e aspro que semejaua cuero de caçon e los braços e las manos e los dedos auia mas secos que podia ser, e las vnnas auia luengas e el vientre traya caydo e sus pies eran resquebrados e muchas llagas por ellos (...).
Un día conoce a Zózimas, un monje bueno y viejo que vive en un monasterio lindante con el desierto. A él le cuenta toda su vida y éste le pide que le permita vivir con ella. La santa se niega y le dice que, hasta que muera, a nadie narre lo que ha oído, que avise al abad de que cuide bien de sus ovejas porque dios gelo verna demandar (2) y que vuelva dentro de un año para darle la comunión.
Cumplido el plazo, Zózimas acude a la cita. E quando ally llego era ora de biespra, e el la cuydo luego fallar ally, mas avn ella non veniera. E digo uos bien que el non dormia, ante cataua daca e dalla por saber si la veria venir commo la cosa del mundo que mas deseaua ver. (3) Juntos rezan y María comulga. Se vuelven a citar.
En esta ocasión el monje se encuentra con que la anacoreta ha muerto. En el suelo hay escrito que lo entierre, pero como él no puede (es viejo, no tiene herramientas y la tierra está muy dura), Dios le envía un león para que cave la fosa. Esto fue nueve dias andados de abril (4).
Zózimas vuelve a su monasterio, cuenta lo vivido y da el recado al abad. Todos (...) fueron marauillados e espantados e ouieron mayor fiança en nuestro Sennor por ende. E a grant deuoçion cantaron todos misa por el cuerpo de santa maria egipçiana. E de alli adelante fezieron grant fiesta en el dia de su finamiento. El abad don Johan començo a emendar en alguno de sus fechos assy commo santa maria egiçiana le enbiara desir por Sosimas el anno ante de aquel. E don zozimas biuio en aquel monesterio çient annos. Entonçe dio el alma a Jhesu cristo, que es enla gloria del parayro con dios, su padre, e con santo spiritu e sera por todo tiempo jamas. (5)
NOTAS:
(1) Manuel Alvar. Vida de Santa María Egipcíaca. Estudios. Vocabulario. Edición de los textos. Tomo I. Madrid, CSIC, 1970, pp. 115 y 117.
(2) Por segunda vez (recuérdese el principio) se menciona la importancia de una buena guía.
(3) Nótese que la actitud de Zózimas es la propia de un enamorado, aunque este amor es espiritual: María sigue seduciendo pero ahora no lleva a sus presas al pecado, sino a casi la santidad.
(4) De nuevo la primavera como época que inicia una nueva vida.
(5) Cito por Manuel Alvar. Vida de Santa María Egipcíaca. Estudios. Vocabulario. Edición de los textos. Tomo II. Madrid, CSIC, 1972.
Enlace externo:
Vida de Santa María Egipcíaca (versión versificada).
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