4. La pirámide.

De Wikillerato

El arte actual camina hacia la “naturaleza interior”, todas las formas artísticas, buscan el giro espiritual, y se esfuerzan por acercarse a lo abstracto, como acabamos de decir, a su naturaleza interior; consciente o inconscientemente obedecen las palabras de Sócrates: “conócete a ti mismo”.

Siguen la enseñanza de la música que desde antiguo no necesita copiar de la naturaleza sino que expresa la vida espiritual del artista y la creación de una vida especial de tonos musicales.

El artista es un creador que ofrece a través de su arte su mundo interior.

Del mismo modo entendemos hoy la búsqueda que realiza la pintura, busca el ritmo de la vida interior, de la vida espiritual, en las construcciones matemáticas y abstractas.

Las artes deben aprender unas de otras y de este modo, alcanzar los medios más adecuados para expresar la vida espiritual. Por supuesto que cada una de ellas tiene su propia fuerza y expresión y es insustituible, pero es importante la unión de las fuerzas de las diferentes artes; de esta unión surgirá con el tiempo el arte, que nosotros hoy vislumbramos, el verdadero y auténtico arte monumental.

Finalmente, - afirma Kandinsky – “aquel que se abisma en los profundos y escondidos tesoros de su arte, es un trabajador envidiable de la Pirámide espiritual que llegará hasta el cielo”.

La unión profunda entre arte y vida espiritual es el fundamento de la estética de Kandinsky y su mayor aportación al progreso y a la perfección de la humanidad.